El hecho de que Artaud se ocupara de la poesía, la pintura, el cine, el teatro y el radioteatro surge de una experiencia con lo teatral que rompe con los límites del saber del sujeto y arroja luz sobre las lenguas y lo imaginario. Es por ello que el pensamiento de Artaud no puede reducirse a una dramaturgia, pues con la cuestión de lo teatral -analizada durante más de cuarenta años y en los ámbitos más diversos- intenta dar una respuesta a la forma de manifestación y expresión de lo reprimido por la sociedad y la psicogénesis. Hacia el final de su vida encontrará, a partir de tres radioteatros, un 'teatro de la crueldad' que permite oír a los dobles y a las sombras en las voces apuntadas que conformaban la primera identidad. Al igual que en la obra de Mallarmé, Jarry y Roussel , en el teatro del espacio subjetivo de Artaud se eliminan los límites del teatro. Sin embargo, Artaud muestra también que el juego teatral de un sacrificio lingüístico y musical podría representar una alternativa para los sacrificios colectivos que el siglo XX puso en escena en la realidad.
El hecho de que Artaud se ocupara de la poesía, la pintura, el cine, el teatro y el radioteatro surge de una experiencia con lo teatral que rompe con los límites del saber del sujeto y arroja luz sobre las lenguas y lo imaginario. Es por ello que el pensamiento de Artaud no puede reducirse a una dramaturgia, pues con la cuestión de lo teatral -analizada durante más de cuarenta años y en los ámbitos más diversos- intenta dar una respuesta a la forma de manifestación y expresión de lo reprimido por la sociedad y la psicogénesis. Hacia el final de su vida encontrará, a partir de tres radioteatros, un 'teatro de la crueldad' que permite oír a los dobles y a las sombras en las voces apuntadas que conformaban la primera identidad. Al igual que en la obra de Mallarmé, Jarry y Roussel , en el teatro del espacio subjetivo de Artaud se eliminan los límites del teatro. Sin embargo, Artaud muestra también que el juego teatral de un sacrificio lingüístico y musical podría representar una alternativa para los sacrificios colectivos que el siglo XX puso en escena en la realidad.