Noche de tormenta en un pueblo de Entre Ríos, en el medio de la escena una aparición: la rana del Ibicuy. Es quien va trazando un recorrido poético sobre el desarraigo, el amor, la maternidad prematura y la magia de los cementerios. La rana del Ibicuy se abre paso a puro hachazo. Su voz es la del monte, la del médano, es la acción que va trazando geografía y sentimientos del pantano. Un desfile telúrico por el pueblo.
Noche de tormenta en un pueblo de Entre Ríos, en el medio de la escena una aparición: la rana del Ibicuy. Es quien va trazando un recorrido poético sobre el desarraigo, el amor, la maternidad prematura y la magia de los cementerios. La rana del Ibicuy se abre paso a puro hachazo. Su voz es la del monte, la del médano, es la acción que va trazando geografía y sentimientos del pantano. Un desfile telúrico por el pueblo.